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Convivencia: acoso escolar

Aclaraciones previas

  • Este material es tan solo una propuesta. Todas las actividades, preguntas y respuestas incluidas a continuación son tan solo ideas y sugerencias para facilitar la tutoría; no deben tomarse de forma cerrada ni literal.
  • Existe un alto contenido verbal: se invita al profesor/a tutor/a a promover el diálogo y la reflexión dentro del grupo-clase.
  • Se presentan actividades de diferente complejidad; se invita al profesor/a tutor/a a simplificar o enriquecer esta propuesta en función del punto de partida y las necesidades del grupo-clase.

Aplicación breve

El material propuesto puede abarcar varias sesiones de tutoría. Si el profesor/a tutor/a desea tratar el tema con mayor brevedad, se sugiere la siguiente simplificación para una sola sesión:

  • Realizar las Reflexiones iniciales de forma general y breve (5 minutos).
  • Realizar la Introducción utilizando solo la Opción 1 (5 minutos).
  • Denominar y describir los diferentes Roles, asociándolos con lo observado en el vídeo y con las Consecuencias para la víctima (15 minutos).
  • Considerar diferentes Tipos de agresión, más allá de lo observado en el vídeo, sin olvidar la diferencia entre agresión y acoso (15 minutos).
  • Recapitular los aspectos tratados en la sesión, enfatizando tanto la responsabilidad de las personas que asumen el rol de observadoras como las consecuencias para la víctima (5 minutos).

Objetivos

  • Facilitar la reflexión sobre la convivencia escolar y el acoso escolar.
  • Promover el diálogo dentro del grupo-clase.
  • Concienciar sobre los diferentes roles que asumen las personas ante situaciones de agresión y de acoso.
  • Concienciar sobre las diferentes formas de agresión y de acoso que existen y que pueden existir en el Centro.
  • Aproximarnos a las consecuencias que puede tener el acoso para las personas implicadas, desde los roles que asumen. 

Reflexiones iniciales

  1. ¿Qué entendemos por «convivencia»?
  2. ¿Por qué se plantea este tema? / ¿Por qué dedicamos tiempo de las tutorías a hablar de convivencia?
  3. ¿Existen actitudes y comportamientos que van en contra de la convivencia en nuestro Centro? ¿Puedes poner algún ejemplo?
  4. ¿Existen actitudes y comportamientos que ayudan a la convivencia? ¿Algún ejemplo?
  5. ¿Qué dice al respecto el Plan de Convivencia? ¿Qué son los derechos y deberes del alumnado?

Convivencia

«Convivir» es en «vivir en compañía de otros/as». Cada día, vivimos dentro de diferentes grupos sociales en los que, de forma continua, nos relacionamos con otras personas.

Convivencia y Educación

La convivencia forma parte de la Educación, en dos sentidos: a) solo en un adecuado clima de convivencia podemos aprender; b) en los Centros escolares, también aprendemos a convivir. De hecho, la Educación tiene por objeto general el pleno desarrollo de la personalidad humana dentro de los principios básicos de convivencia.

Conductas contrarias

Algunos comportamientos contrarios a la convivencia: alteraciones del funcionamiento de las clases, burlas, motes, otras agresiones verbales o físicas, exclusión social, marginación social, amenazas, humillaciones, etc.

Conductas que facilitan

Algunos comportamientos que ayudan a la convivencia: respeto por las normas de clase y del Centro, respeto por la diversidad humana existente en nuestro entorno, defensa de los derechos propios y de los demás, etc.

Derechos y deberes

En nuestra agenda escolar, podemos consultar el Plan de Convivencia, los derechos y los deberes del alumnado. Derechos y deberes son las dos caras de una misma moneda: garantizar derechos requiere cumplir deberes.

Introducción

Opción 1: Vídeo «Activa tu poder»

  • Resumen: ¿De qué trata el vídeo? / ¿Qué sucede en el vídeo?
  • ¿Observamos algo relacionado con lo hablado anteriormente (convivencia, comportamientos, derechos, deberes, etc.)?

Opción 2: Dramatización

Recread una situación de agresión de un compañero/a hacia otro/a en la que se distingan claramente: la persona agresora y su comportamiento; la persona víctima y su comportamiento; las personas observadoras y su comportamiento.

  • Puede utilizarse el agrupamiento que se prefiera.
  • Puede distinguirse entre agresión aislada y acoso escolar.
  • Puede sugerirse la inspiración en casos reales de los que hayan sido testigos/as o de los que tengan conocimiento (entorno cercano, medios de comunicación, etc.).

Tras la recreación, se plantean preguntas similares a las de la Opción 1.

Roles

  • ¿Qué personajes aparecen en el vídeo?
  • ¿Qué rol desempeña cada personaje?
  • ¿Existe alguna «víctima»? ¿Cómo actúa? ¿Cómo crees que se siente? ¿Por qué crees que no actúa de otra manera?
  • ¿Existe algún «agresor»? ¿Cómo actúa? ¿Cómo crees que se siente? ¿Por qué crees que no actúa de otra forma?
  • ¿Qué rol asumen todos los que no son ni «víctima» ni «agresor»? ¿Cómo actúan? ¿Cómo crees que se sienten? ¿Es posible ser un simple «observador/a»?

La víctima

  • Actúa desde un plano de inferioridad y pasividad.
  • Podemos imaginar que se siente «inferior» y «débil».
  • No puede actuar de otra forma, porque su propia personalidad facilita que otros/as le agredan, mientras el resto de personas lo permiten.

Las víctimas suelen presentar las siguientes características: son considerados como débiles, aislados o diferentes por sus compañeros/as; tienen peores habilidades de comunicación y de relación; baja autoestima; sentimientos de miedo e inseguridad; actitud pasiva.

El agresor

  • Actúa desde un plano de superioridad y control.
  • Podemos imaginar que se siente «superior» y «fuerte».
  • No necesita actuar de otra forma, porque la víctima le permite agredir y el resto de personas también le permiten agredir.

La personalidad agresiva excluye y discrimina al diferente, al tímido, al gordo, al de las gafas, al diferente en cuanto al género o cualquier otra característica física, religiosa, racial, de orientación sexual, de personalidad, etc. Cualquier excusa es buena.

El perfil del agresor está muy relacionado con la frustración. A veces, personas que se sienten inseguras y descontentas con sus vidas pueden ocultarse tras una máscara de agresividad y supuesta seguridad y control.

En general, las personas agresivas se caracterizan por: deseo de hacer daño, de ejercer control o dominar; comportamiento antisocial; deseo de sobresalir ante el grupo.

Los observadores

  • Actúan desde un plano de pasividad e indiferencia: «No es mi problema».
  • Si no se sienten indiferentes, pueden sentirse temerosos e impotentes.
  • Es fundamental que actúen de otra forma: el agresor necesita del silencio o de la complicidad de los observadores.
  • NO es posible ser un mero «observador». Cada espectador supuestamente «pasivo» es en realidad un espectador «activo»: su comportamiento de supuesta indiferencia lo convierte en colaborador y cómplice del agresor.

Tipos de agresión

  • ¿Es lo mismo «agresión» que «acoso»?
  • ¿Qué diferentes tipos de agresión pueden darse?
  • ¿Qué entendemos por «acoso escolar»?

Agresión y acoso

  • Agresión: acción que pretende causar daño a otra persona; acción intencional cuya finalidad es causar daño a otra persona.
  • Acoso: agresiones intencionadas y repetidas hacia un alumno/a, por parte de uno o vario de sus compañeros/as, desde una relación de poder asimétrica en la que el agresor o los agresores atentan contra la dignidad de la víctima.

Tipos de agresión

  • Social:
    • Exclusión pasiva (ignorar).
    • Exclusión activa (no dejar participar).
    • Marginación (discriminar por razón de sexo, característica física, discapacidad, etc.).
  • Verbal:
    • Motes, burlas, insultos, resaltar defectos, hacer comentarios discriminatorios, etc.
    • Hablar mal de alguien.
  • Física:
    • Golpes, empujones, pellizcos, etc.
    • Material: esconder cosas, dañar materiales, etc.
  • Humillaciones y vejaciones.
  • Amenazas, chantajes e intimidaciones.
  • Sexual:
    • Todas las anteriores, contra la libertad sexual (incluida la identidad y la orientación sexuales).
    • Abuso sexual.
  • Ciberacoso:
    • Todas las anteriores, a través de medios tecnológicos.
    • Grabaciones y difusiones.

* Toda agresión, del tipo que sea, tiene, además, un efecto de daño psicológico.

Acoso escolar

  1. Intencionalidad. Las agresiones van dirigidas a una persona concreta con la intención de convertirla en víctima.
  2. Repetición. Las acciones agresivas se repiten en el tiempo y la víctima las sufre de forma continuada, generando en ella la expectativa de ser blanco de futuros ataques.
  3. Desequilibrio de poder. Se produce una desigualdad de poder físico, psicológico y/o social.
  4. Indefensión. El objetivo de las agresiones suele ser un único alumno/a, que se coloca en una situación de indefensión: «haga lo que haya, recibiré las agresiones».
  5. Posible componente colectivo. Pueden existir varias personas que asumen el rol de agresores.
  6. Observadores. Habitualmente, el acoso es posible gracias a la observación y el conocimiento indiferente de terceras personas.

Consecuencias

  • ¿Qué efectos puede tener el acoso sobre la víctima?
  • ¿Tiene alguna consecuencia para el agresor? ¿Y para los observadores?

Víctima

  • Fracaso escolar.
  • Trauma psicológico.
  • Insatisfacción, infelicidad.
  • Ansiedad.
  • Depresión.
  • Problemas de personalidad.
  • Riesgos físicos.
  • Riesgos para un desarrollo equilibrado.

Agresor

Los efectos del acoso escolar no solo resultan nocivos para la víctima. El acosador, en caso de impunidad, puede ver reforzada su conducta antisocial, con probabilidad de que persista en su vida adulta. Por ello, es necesario un tratamiento firme que conduzca a la persona agresora a percibir los efectos negativos de su comportamiento, en primer lugar, en los demás y, en segundo lugar, en sí misma.

  • Sobrevaloración del hecho violento como socialmente aceptable y recompensado.
  • Factor predisponente para una futura conducta antisocial.

Observadores

La nocividad del acoso escolar alcanza incluso a los observadores, bien a través de un clima de terror en el que todos se ven afectados como víctimas en potencia, bien a través de la asunción de una actitud de pasividad hacia la violencia y la injusticia.

  • Actitud pasiva y complaciente ante la injusticia y la violencia.
  • Percepción equivocada de la valía personal y de las formas de relación.
  • Verse implicado en un caso de acoso: la indiferencia coloca al observador al lado del agresor.